Miércoles, 02 Septiembre 2020 Orgullo local

Músicos y cuentistas del mundo reunidos en un proyecto destinado a chicos internados

“Palabras y Musiquitas” es una creación de la Fundación Arte que Ayuda a Curar para poder llegar en tiempos de pandemia con cuentos y canciones hasta los chicos que atraviesan un tratamiento de internación en los distintos hospitales de la ciudad

La Fundación Arte que Ayuda a Curar se desempeña desde hace varios años en los diferentes hospitales de Rosario, realizando intervenciones artísticas en los espacios donde muchos niños tienen que atravesar largos tratamientos producto de alguna enfermedad.

Elizabeth Aguillón, artista baigorriense, es la referente de la Fundación y a partir de una experiencia personal que atravesó con la internación de su propia hija, empezó a pensar en “humanizar” a través de murales y otro tipo de actividades artísticas las salas donde muchos niños pasan gran parte de sus días, a causa de algún tratamiento médico.

“Palabras y Musiquitas” es la forma en que intentaron “reinventar” muchas de las intervenciones que venían realizando y que tuvieron que ser repensadas producto de la pandemia de coronavirus. En diálogo con Aguillón brindó detalles de este proyecto que reúne a músicos y cuentistas de todo el mundo condensados en un formato de libro con un código QR que llegará de manera gratuita a gran parte de los hospitales de la ciudad.

«Nos reinventamos y la pandemia no impidió que dejemos de trabajar», dijo Aguillón y detalló que el lanzamiento de este nuevo proyecto es la continuación de un trabajo anterior: «Desde la Fundación ya habíamos armado un libro que se llamó Simón y que está destinado a pacientes oncológicos. Es un cuento que les explica a los chicos en un lenguaje simple lo que es atravesar un tratamiento de cáncer infantil. A partir de ese proyecto ahora armamos una red mundial de narradores, músicos y cuentacuentos con los que editamos Palabras y Musiquitas».

«La idea es entregar un material impreso, acompañado de un código QR con el que se puede escanear y verlo directamente en un teléfono celular”, contó Aguillón y explicó que lo pensaron de esa manera porque “muchas veces los chicos que están internados no tienen la fuerza suficiente ni para sostener un cuento. De esta manera, los pueden también escuchar a través de unos auriculares».

El material es el resultado del trabajo coordinado de los voluntarios de la Fundación Arte que Ayuda a Curar junto con la editorial «A que te juego un cuento» y reúne a cuentistas y músicos de diferentes provincias, sumado al aporte de artistas de “Uruguay, Cuba, Colombia, España, Paraguay, entre otros países más”, agregó Aguillón.

“Nos han enviado los audios en formato mp3 y un grupo de voluntarios se encargó de transcribir los cuentos narrados para ser pasados a interpretación de señas, que luego serán videos que también estarán subidos a nuestra página web”, detalló Aguillón respecto a la multiplicidad de formatos en que fue pensado este proyecto.

“La idea es comenzar a distribuirlos en los hospitales de la ciudad para finales de agosto y principio de septiembre”, adelantó Aguillón y aseguró que será “una forma de poner en valoración el trabajo de los artistas y de cómo las artes pueden acompañar los procesos de cura en cuestiones de salud».

La referente de la Fundación contó que “Palabras y Musiquitas” será un material que llegará a todos los hospitales de Rosario “principalmente donde se encuentran las infancias pertenecientes a los sectores vulnerables”, y que la fecha de lanzamiento se pensó para después de los festejos por el día del niño, momento en que se suelen recibir presentes en los hospitales producto de diferentes colectas solidarias.

Con respecto a esto último, Aguillón compartió que desde la Fundación vienen pensando en que en algún momento se pueda establecer un “día del niño hospitalizado” que contemple, a la hora de pensar en regalos, las particulares de muchos de los niños que tienen que atravesar un proceso de internación. «Muchas veces existe una buena voluntad, pero es importante comprender que no es la misma infancia la que se encuentra cuando tiene que pasar por una internación», concluyó Aguillón.


Por Diego Carballido – Con La Gente