El incidente tuvo lugar el pasado lunes a las 9:30 cuando un remís, de una empresa con base en Granadero Baigorria, llegó a la casa de una vecina. A pesar de que los residentes eran conscientes de la sordera de Luna y siempre procuraba esquivarla, el conductor la embistió. La situación empeoró cuando, al escuchar los llamados de alerta, el remisero aceleró y la golpeó nuevamente, sin detenerse, según denunció la mujer afectada.

Priscilla, la dueña de Luna, expresó que los vecinos se unieron para buscar al remisero, pero éste no asumió responsabilidad alguna. Tras intentar contactar a la remisería local sin éxito, lograron localizar al conductor, quien inicialmente prometió hacerse cargo. No obstante, tras esperar toda la mañana, la empresa informó que el conductor y el propietario del vehículo no se responsabilizarían por el incidente. Ante la posibilidad de presentar una denuncia, la respuesta de la empresa fue poco favorable y despectiva, según lo resumido por la mujer.

Finalmente, los dueños de Luna buscaron ayuda en el Instituto Municipal de Salud Animal (Imusa), donde proporcionaron antibióticos a la perra y programaron una cirugía para los próximos días. Manuel, representante de la protectora “Los rescataditos de Manu”, se ofreció a colaborar con la familia dueña de Luna, iniciando una colecta de fondos para el tratamiento de la perra, así como para cubrir los traslados a la veterinaria y brindar apoyo en el proceso de denuncia contra el presunto agresor.

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