Viernes, 24 Enero 2014

España cerró el 2013 con un histórico 26% de desempleo

A pesar de los anuncios optimistas por parte del gobierno y el FMI, cifras oficiales desnudan vigencia del flagelo social

 

El desempleo en España cerró el año 2013 con una nueva subida, hasta el 26,03 por ciento, manteniéndose como el principal punto negro de una economía que según el gobierno y el Fondo Monetario Internacional (FMI) ha comenzado a revertir su tendencia negativa, pero de una forma aún insuficiente para absorber los efectos de la crisis en el mercado laboral. Lo cierto es que detrás de los números están las personas: 686.600 hogares, por lo prolongado de la crisis, han agotado prestaciones sociales y subsidios por desempleo, por lo que ningún integrante de esas familias recibe ingresos.

España, cuarta economía de la zona euro, sometida desde finales de 2011 a unas políticas de austeridad draconianas para sanear sus finanzas públicas, no logró mantener la tendencia a la baja del desempleo registrado en los dos trimestres anteriores de 2013, pese a que el gobierno anunció que el país está saliendo de una recesión de dos años y el FMI acompañó con que va “más rápido” de lo esperado El jefe de gobierno Mariano Rajoy sostuvo el miércoles pasado que “lo peor de la crisis ya ha pasado”.

A finales de diciembre había en España 5.896.300 desempleados, o sea 8.400 menos que en el trimestre anterior, pero al mismo tiempo se redujo la población activa, en parte por la emigración de personas y también por el desánimo que ha llevado a muchos a dejar de buscar trabajo, lo que explicaría el contraste entre bajada del número de desocupados y subida porcentual del desempleo.

“Efectivamente, hay parte de la población que ante mejores perspectivas de empleo en otros países va buscando mejores perspectivas”, afirmó ayer el secretario de Estado de Economía, Fernando Jiménez.

Según la Encuesta de Población Activa (EPA) del Instituto Nacional de Estadística (INE), que contabiliza las personas que buscan activamente un empleo, el número de desocupados bajó en 69.000 personas en 2013, lo que supone que “por primera vez desde el segundo trimestre de 2007 se produce un descenso anual”.

Sin embargo, en términos porcentuales, el desempleo se mantiene alto en el 26,03 por ciento, frente a una tasa del 25,98 que había registrado en el trimestre anterior, una de las más altas de los países industrializados.

La crisis social sigue siendo profunda en un momento en que el país, doblemente golpeado en 2008 por el estallido de la burbuja inmobiliaria y el comienzo de la crisis financiera internacional, acaba de registrar un pequeño crecimiento saliendo de una recesión de dos años.

El secretario de Estado de Economía, Jiménez, prefirió poner el foco en la caída del número de desempleados. “Esperamos que este cambio de tendencia se mantenga de manera que en la primera mitad del año ya pasemos a registrar tasas de crecimiento del empleo brutos positivas”, confió.

“No obstante, la tasa de paro sigue siendo inaceptablemente elevada y es necesario perseverar en las reformas estructurales, perseverar en el proceso de consolidación fiscal”, consideró.

El Banco de España publicó ayer su estimación para 2013, en las que afirma que el país “ha seguido una trayectoria de mejora gradual”, a pesar de que el PIB se contrajo un 1,2 por ciento entre enero y diciembre.

En el último trimestre, el Banco de España detectó un leve progreso de la demanda interna, en punto muerto debido al desempleo.

Pero, las previsiones de crecimiento siguen siendo bajas y, así, el gobierno espera para 2014 un subida del 0,7 por ciento del PIB, aún insuficiente para estimular el empleo.

La cara más amarga del mercado laboral sigue en los hogares con todos sus miembros desempleados. Llegó hasta los 1,832 millón. El número de hogares en los que nadie percibe ingresos está en su máximo histórico: 686.600.

Entre los jóvenes españoles los “parados” superan el 55%

Los jóvenes siguen entre los más afectados por el “paro”, como le dicen en España a la desocupación, con una tasa de desempleo del 55,06 por ciento en la franja de edad de entre 16 y 24 años. La cifra registró un alza respecto a los tres meses anteriores.

Con la confirmación estadística ibérica, la preocupación por el desempleo juvenil que afecta además de España a otros países, también se trasladó ayer a Davos. Suiza, en donde sesiona el Foro Económico Mundial.

Actualmente, 75 millones de jóvenes están desempleados en todo el mundo, según la Organización Internacional del Trabajo (OIT). Los niveles más altos se encuentran en Oriente Medio y en países europeos como España o Grecia.

“Si no se hace nada para combatir el desempleo juvenil, la paz social, el mosaico social tal y como lo conocemos ahora, va a reventar”, advirtió Muhtar Kent, el presidente de Coca-Cola, en el Foro Económico Mundial que se organiza anualmente en esta ciudad de los Alpes suizos.

Andalucía, la más castigada

La región sureña de Andalucía, que sufrió el estallido de la burbuja inmobiliaria tras basar su crecimiento en la construcción ligada al turismo, mantiene su tasa récord del 36,32 por ciento de desempleo, mientras que el País Vasco, rica región industrial del norte, registra la tasa más baja con un 15,76.

En todo el país aumentaron en 24.600 los hogares en que todos sus miembros activos están desempleados: 1.832.300 millones de personas.

En el último trimestre del 2013 había 65.000 personas sin trabajo menos que en el mismo período de 2012, en total 5.896.300. En los datos desestacionalizados de empleo, por primera vez desde de 2008 repuntó. Creció un 0,29 por ciento. Este pequeño dato parece apuntar un cambio de tendencia.

Profesionales de la salud marcharon por el derecho al aborto

Desde ginecólogos hasta juristas, pasando por neuropsiquiatras, varias organizaciones profesionales de la Salud se movilizaron contra la reforma que casi suprime el aborto en España, rechazando “volver a la época franquista”.

El gobierno conservador de Mariano Rajoy ha desencadenado una tormenta entre los colectivos de izquierda y feministas de Europa al aprobar un proyecto de ley que prácticamente suprime el aborto en España, salvo casos excepcionales.

La actual ley del aborto, aprobada en 2010 durante el gobierno socialista, autoriza la libre interrupción del embarazo hasta la 14ª semana y hasta la semana 22 en caso de malformación del feto.

“Estamos sobre todo centrados en que la ley no salga”, explicó a la AFP Isabel Serrano, antigua presidenta de la Federación Nacional de Planificación Familiar y coordinadora de “Decidir nos hace libres”, un colectivo que reúne a más de 300 asociaciones.

Pero, si el texto se aprueba en el Parlamento, “seguro que va a haber sectores sanitarios, digamos insumisos, que no van a cumplirlo o incluso algunas comunidades autónomas porque se ha hablado que Cataluña, Galicia, Extremadura, Andalucía no lo aplicarán”.