Lunes, 10 Septiembre 2012

Romina Luciani, la elegida

Ramos ya habría designado su sucesora. Aunque nadie lo ha afirmado, todas las señales dejan entrever que en diciembre, al renovar las autoridades el concejo, la edil sería votada como presidenta del mismo convirtiéndose automáticamente en primera mandataria. Todo depende de su salud

 

Por Hugo Cravero - La continuidad del gobierno de Alejandro Ramos ya estaría signada para Romina Luciani. Se podría afirmar que en diciembre, cuando las autoridades del concejo se renueven, el cargo de presidente del cuerpo recaería en la edil, que el 10 de junio último tuvo un violentísimo accidente con su vehículo a la salida de una fiesta escolar.

La información, que es un secreto a voces en los corredores políticos vernáculos, se haría con un fuerte acuerdo dentro del mismo seno del ‘ramismo’, que por lo menos tuvo tres postulantes directos al cargo que Alejandro licenció para asumir como secretario de Transporte de la Nación el 8 de marzo de este año. Los que están en pugna por este cargo, por lo menos para el 2013, son; Mario Rosales, actual intendente interino; Érika Gonnet, diputada provincial y Romina Luciani; concejal de la ciudad.

Aunque el tema elecciones complementarias a intendente parece lejano, por lo menos hasta que el mismo Ramos defina que va hacer con su mandato hasta el 2015 (con una posible candidatura a diputado nacional por el Frente para la Victoria), los cruces entre los ‘popes’ de la ejecutivo fueron ásperos.
Demás está decir que la interna de Luciani y Gonnet se remontan desde cuando ambas mujeres eran integrantes del gabinete de Alejandro en su primer mandato y que continuó después. La disputa entre las funcionarias hizo que se tejieran y destejieran alianzas internas una y otra vez.

Por su parte Rosales siempre manifestó su incondicional labor a Alejandro. “Este es el gobierno de Ramos”, dijo a este medio hace unos meses cuando tuvo que asumir el cargo comunal de la noche a la mañana.

“Es Romina la elegida de Ale, sólo depende de su salud”, confiaron fuentes reservadas a éste sitio. Y todo lo indica así. Cuando la noche del domingo 10 de junio la legisladora local conducía su auto, desde un encuentro organizado por una cooperadora escolar siendo fuertemente chocada por otro vehículo a la altura del control que une Baigorria con Rosario, no se pensó jamás el cariño masivo de vecinos pidiendo por su salud. Por unos días el estado crítico de la joven tuvo en vilo la ciudad, y hasta las rencillas fueron suspendidas, pues la diputada Gonnet era la responsable de dar los partes diarios a los medios.

No mentiríamos en decir que ese termómetro midió también en la decisión de Ramos. Los encuentros, las visitas al sanatorio donde estaba internada a Romina, las cadenas de oraciones, las misas en su nombre y lo jamás antes visto; la explosión de redes sociales pidiendo por su salud, potenció a la joven y confirmó que ya no era sólo un cuadro político del mismo ADN del gobierno local, sino también una persona altamente querida por todos sus trabajos sociales y el compromiso en la gestión pública.

La semana pasada volvió a aparecer Romina. En sillas de ruedas, pero de un semblante admirable. Fiel a su estilo incansable, la piba de 29 años, multifuncionaria de la primera gestión de Ramos y hoy en día concejal, participó de una actividad luego del accidente que le llevó semanas de hospitalización y varias operaciones por las facturas recibidas. Fue en la feria del Parque Sur el domingo 2 de septiembre por la tarde.

Esta presencia volvió a encender facebook y twitter, pero además a avivar la idea de su asunción como intendenta interina desde el 10 de diciembre. “Mirá tenía como para un año de recuperación y va a tardar menos… si está en condiciones de asumir, ella es la intendenta, y si Ale va de diputado, es la candidata”, aseguró un allegado a la gestión.

Mario Rosales por su parte no tendría inconvenientes de volver al concejo y encabezar el año próximo la lista de concejales del oficialismo.